Llamé al SAME (me tomaron el nro de teléfono nada más) y con la pareja de yanquis (tenían acento yanqui) nos dedicamos a esperar, y a tratar de despertar al hombre que estaba en el piso. Yo le decía "señor, señor", los chicos me dijeron que ellos habían intentado un rato largo y no había caso. Yo les dije que me parecía que estaba borracho, porque estaba en un estado tal de abandono total que me imaginaba que era la borrachera la que lo hacía estar tirado así en el piso.
La ambulancia tardaba (evidentemente uno tiene que decir que es una EMERGENCIA en mayúscula para que vengan rápido) y la pareja propuso ir a buscar a un policía que estaba a la vuelta en la esquina de Corrientes y Libertad. Yo me quedé con la bella durmiente esperando la ambulancia. La gente que pasaba por la vereda y la calle lo miraba primero a él y después a mí tratando de buscar algún vínculo, pero nadie me preguntó nada. A los dos minutos llegaron los chicos con el policía, un gordito bonachón, que hablaba como un civil (los policías suelen poner ese formalidad policial que es odiosa) El policía se acerco a la cara del hombre, nos miró y nos dijo: "está borracho como una cuba" y despacio empezó a tratar de reanimarlo, lo sacudió suavemente de la camiseta de fútbol que tenía puesta (la tenía del lado del revés) y le decía:
-Despertate, Campeón, despertate. A ver parate, Campeón. ¿De dónde sos? ¿Del Bajo Flores? Sos peruano, no? Dale, Campeón que los chicos están preocupados.
Cuando el campeón se dio cuenta que era un policía el que lo estaba sacudiendo se despertó y se puso de pie, pero las palabras le costaban y hablaba muy bajito.
A través del policía nos enteramos de que el Campeón era del Bajo Flores y de que estaba de parranda desde el viernes (esto pasó un domingo) además que el Campeón es carpintero. El policía me explicaba que el había trabajado en esa zona y que conocía a mucha gente peruana y boliviana. "Son gente excelente, pero cuando toman, TOMAN" "Y más para la fiesta de Malín*, ahí toman durante semanas" El campeón asentía orgulloso y somnoliento
En el ínterin de nuestra charla, llegó la ambulancia del SAME, la doctora intentó revisarlo pero estoicamente el Campeón le dijo que no era nada. La doctora era una chica joven con anteojos chiquitos y pelo rojizo, le hablaba con dulzura "estás seguro? no querés que te miré esa herida?" Como él se negaba, decidieron que lo mejor era dejarlo tranquilo y que tomara el colectivo. "Tomás el 50?," me preguntó el policía "Sí," contesté. "Entonces, por favor, ayudalo a subir y avisale al chofer, porque seguro que se duerme en el trayecto"
Cuando subí al colectivo con el Campeón (que apenas podía tenerse en pie) le avisé al colectivero que él se bajaba en una parada específica. El colectivero me dijo:
-Acá sube y baja mucha gente, yo no puedo estar al pendiente de todos.
Todavía me estoy preguntando si el Campeón llegó a su casa...
Nota:
*No estoy segura del nombre de la celebración, estuve buscando en internet, pero no encontré nada.
Etiquetas: En la calle
La llaman realidad: que cosa, no? ese miedo/paranoia/esloquepasa/yanquis/festividadenlibertad/sifueserubiay noperuano/ratisafirmativos/mamua/negligencia/bondier/stress... todo eso, y mucho mas, hace de esto, una gran ciudad.